jueves, 7 de septiembre de 2017

La verdadera lucha

La Argentina siglo XXI está plagada de las llamadas "organizaciones sociales" que son grupos de personas surgidos a partir de la crisis 2001 - 2002 que dicen representar a los sectores socioeconómicos menos pudientes que sufrieron más crudamente los efectos de dicha crisis.

Los niños nacidos durante dicha crisis ya son jóvenes adolescentes que deberían estar terminando su escuela secundaria y deberían estar preparándose para continuar sus estudios o salir a competir en el duro mercado laboral que propone la realidad actual con las armas que hayan cosechado durante ese lapso en el que la sociedad debió haberlos preparado, quienes eran niños durante la crisis hoy ya son adultos y, muchos de ellos ya son padres de familia, trabajadores, profesionales, etc.

La cosa es que estos muchachos han sido muy eficaces en la consecución y distribución de ayudas de emergencia para gente con necesidades básicas insatisfechas, han servido para que la gente se organice en la emergencia pero, no han sabido generar ni provocar que esa gente salga de la situación de emergencia; quienes comandaban movilizaciones con grupos de gente pidiendo subsidios incorporan constantemente a los hijos y nietos de sus militantes a las filas de quienes piden (mendigan), una ayuda del estado para poder "parar la olla" y no parece que hubiera perspectiva de que las generaciones futuras tengan otro "oficio".

Ahora bien, en un país puede haber un grupo de gente que viva sin  hacer nada mientra los demás trabajan; viene a ser algo así como el cuñado vago o el hermano tonto al que hay que mantener, en un país como Argentina es inmoral que alguien muera de hambre pero, no hay nada peor para el ser humano que la falta de esperanza y creo que ahí está el problema.

De algún modo, se logró desalentar al trabajo, de algún modo se logró desalentar al capital y, en este mundo, nos guste o no, sin capital y sin trabajo no se puede producir; si no se produce no hay que consumir y sobrevienen los problemas.

Gobernar para los pobres es gobernar para que los pobres dejen de serlo no gobernar para que cada día haya más pobres, gobernar para los pobres es darle la posibilidad de dejar de ser pobres. Nadie puede hacer por alguien lo que ese alguien no hace por si mismo pero se puede buscar la forma de que los niños estén bien alimentados, puedan estudiar y puedan progresar; un niño lavando parabrisas en una esquina es un fracaso del sistema, lo mismo que un niño repartiendo estampitas, los chicos deben estudiar, aprender y eso les permitirá progresar. No hay nada más cruel que subsidiar la vagancia, incitar a la nada y enseñar el conformismo; un padre que educa a su hijo para piquetear mendigando planes lo condena a una vida de limosnas.

Cuando Tomás Bulat dijo: "Cuando se nace pobre, ser estudioso es el mayor acto de rebeldía contra el sistema. El saber rompe las cadenas de la esclavitud" creo que dio en el clavo y, la verdadera lucha es esa, que quien quiera ser estudioso pueda serlo, que quien quiera progresar pueda hacerlo y, sobre todo, que quien no quiera hacerlo no estorbe a los demás.

domingo, 5 de marzo de 2017

Pirómano Sueco

Hace un par de décadas un amigo me dijo: "a esta película ya la vi en blanco y negro y ahora me la quieren mostrar como nueva sólo porque está en colores".

La piromanía (del griego πυρός pyrós, "fuego" y μανία manía "locura") es la tendencia patológica a la provocación de incendios. Al sujeto que padece piromanía se le denomina piromaníaco o pirómano.El síndrome de Estocolmo es una reacción psicológica en la que la víctima de un secuestro, violación o retención en contra de su voluntad, desarrolla una relación de complicidad y un fuerte vínculo afectivo, con quien le ha dañado física y/o psicológicamente. Principalmente se debe a que malinterpretan la ausencia de violencia contra su persona como un acto de humanidad por parte del agresor.


Aclarados estos términos podemos empezar; en medio de esta vorágine de declaraciones políticas con que comenzó el segundo mes del año tuve el privilegio de escucharlo al hermano Eduardo (hermano de Carlos Saúl) explicando, mientras mostraba sus diferencia con los Kirchneristas (que no son peronistas según él), que no todo el peronismo es igual y que él pertenecía a ese peronismo heroico que nos "salvó" del desastre en que había dejado Alfonsín al país; luego, siguió explicando como ese peronismo épico nos había salvado del desastre que había dejado De La Rúa y me puse a pensar: estos tipos provocan el incendio, alimentan el fuego y después aparecen como bomberos a salvarnos la vida como si no tuvieran nada que ver; alguna vez conocí la historia de un bombero que hacía exactamente lo mismo (terminó preso y en tratamiento siquiátrico). También recuerdo la película "Amor Eterno" (Endless Love) que en 1981 dirigió Franco Zefirelli y protagonizaron Brooke Shields y Martin Hewitt, alguno quizás no la haya visto pero puede haber escuchado el hermoso tema que cantaba Diana Ross junto a Lionel Ritchie. El argumento central de esa película era un amor adolescente en el que el personaje de Martin Hewitt intenta recuperar la relación con su novia convirtiéndose en un héroe que la salve pero, para poder salvarla primero tiene que incendiarle la casa; el resultado final es la familia de ella destruída y él internado en un hospital siquiátrico.



Como vemos, la reacción lógica ante un pirómano es apresarlo y tratarlo; es un enfermo y su enfermedad provoca daño a los demás aunque su intención fuera buena y su objetivo fuera convertirse en héroe.

Ahora bien, cuando ante un atentado, la víctima se identifica con su verdugo e intenta protegerlo dijimos que se producía el"síndrome de Estocolmo" es decir, imaginemos a un pirómano (o quizás un simple incendiario) al cual descubrimos prendiendo fuego, y luego aplaudimos y abrazamos cuando nos viene a salvar del incendio que él mismo provocó, le hacemos un monumento y cantamos loas en su honor.

Señores, nos estamos comiendo el amague; el reclamo es justo pero la protesta tiene como único objetivo desestabilizar al gobierno, ahora resulta que las maestras que laburaban cuatro horas y tenían tres meses de vacaciones son importantes, este tipo también le paró al gobierno anterior pero no se olviden que fue al gobernador cuando la presidente había decidido sacarlo del medio, antes de tener que recurrir a él para ponerlo de candidato; una vez que lo declararon amigo nunca más le hicieron una objeción.

Como dijo mi amigo, es la misma película con un par de colores más, quizás en 3D , pero ya la vimos; no quiero estar contándole a mis nietos como estos incendiarios nos salvaron de Macri.