jueves, 22 de diciembre de 2005

La huelga más cara del sigo XXI

Según leo en Página 12, la huelga de transportes en New York está costando varios millones de dólares diarios. Parece mentira que, en el ombligo del mundo, pasen estas cosas que suponí­amos reservadas para los paí­ses periféricos; seguramente la mayorí­a de los newyorquinos no conocí­an este tipo de situaciones.
Creo que este sigol XXI trae algunos cambios en el mundo a los que habrá que adecuarse y, no importa cuan importante haya sido el papel de cada uno en la historia, hay que adaptarse a dichos cambios para no sufrir malas consecuencias. Todo hace suponer que no podemos saber a ciencia cierta que nos puede sorprender, ya no en un futuro lejano sino más bien en un futuro inmediato.
Como dice el refrán "Cuando veas las barbas de tu vecino cortar....".

miércoles, 21 de diciembre de 2005

El pago al fondo y sus consecuencias

y el mingo?Realmente se han escrito muchas cosa sobre el pago al FMI por parte de la Argentina. Para la mayoría de nosotros el fondo es sinónimo de tantas cosas negativas que, al margen de que no es toda la deuda externa la que se salda, es un problema menos, un yugo que nos sacamos de encima.

En los '80 llegó a ser un mito tan importante que un grupo musical: Viuda e hijas de Roque Enroll (posteriormente denominado simplemente: Las Viudas), liderado por Mavi Díaz, cantaba un tema que se llamaba precisamente "FMI", Fondo Monetario Internacional.

Seguramente habrá (ya los hay) quienes aplaudan la medida y quienes (también los hay) hablen de un simple maquillaje y de que, en definitiva, no resuelve nada. Pero lo cierto es que cambia para siempre algo que ya era parte de nuestra realidad cotidiana, alguien dijo: "¿y ahora a quien le vamos a echar la culpa?".
Y realmente, como dice el Pagina 12 de hoy, sería un triste efecto colateral tener que hacerse cargo del mingo.

viernes, 16 de diciembre de 2005

A quien le importa?

Pensando en algo para escribir me acordé de esa canción de Thalí­a (creo que es de ella) "A quien le importa" y me vino a la mente lo ocurrido esta semana.
Esta semana ocurrieron cosas que, en otras circunstancias, hubieran revolucionado mi vida, hubiera pensado mucho en ellas, escrito sobre algunas y me habrí­an preocupado otras. Algo de futbol, algo de polí­tica, algunas trivialidades, etc.
Pero lo importante es que, en mi vida, pasaron cosas que taparon casi totalmente cualquier ruido externo que pudiera ocurrir. Un acontecimiento extraordinariamente maravilloso y un par de cuestiones negativas que no por ser menores dejaron de preocuparme.
Se termina una semana plagada de emociones para mi, nunca fui supersticioso pero el martes 13 vino cargado este fin de año (para bien). Se abren nuevas esperanzas y nuevos horizontes, nuevos caminos para buscar la felicidad anhelada y, como leí­ alguna vez: "ante la inmensidad del universo y las estrellas me parece tan trivial la posibilidad de que me salga un grano en la cara..."
El tí­tulo es que, seguramente, a nadie le importa lo que estoy escribiendo ahora (o por lo menos eso creo) pero sentí­ la necesidad de hacerlo solo por darme el gusto y publicar algo desde adentro.
Ya volveré en otra oportunidad a comentar sobre deudas pagadas, presidentes inquietos y las bocas de los pumas, por ahora estoy en "a quien le importa".