[/caption]Comienza la cosa cuando leo en Diario Ti que, mediante un software especializado, puedo saber si mi proveedor de internet intenta espiar si descargo en mi máquina música o películas, con todo este tema de las olimpiadas creo que todos estamos muy sensibles por el tema de la privacidad en la red. La cosa sigue cuando, sin salir de mi asombro, leo que hay un robot con sentimientos "auténticos"; "ya no saben que inventar" sería el comentario fácil. en realidad solo reacciona bién a algunos estímulos que su programador considera "atención positiva" lo que no quiere decir que realmente lo sea. Por más que se esfuerce la tecnología, la maravillosa máquina humana es irreproducible.
Hoy parece que se despertaron todos los fantasmas juntos: por un lado, nuestros hermanos bolivianos están en un estado de convulsión grave que lleva a que se digan algunas cosas fuertes en los medios, InfoBae y Página 12 se hacen eco, entre otros, del despelote y por otro, nosotros tambien tenemos nuestros fantasmas vernáculos que nos recuerdan cotidianamente nuestras culpas, no creamos que llegamos hasta aquí por generación espontánea; tenemos nuestra historia de errores y fracasos y, estos personajes surgidos de nuestra propia novela de terror, nos lo recuerdan cotidianamente.
[caption id="" align="alignright" width="305" caption="Dicen que vieron a Maddie esta semana en Bruselas"]
[/caption]El día sigue, a trabajar mientras en Bélgica, todavía nos dan esperanzas de que Maddie esté viva, los chinos se vuelven olímpicos y Cobos se ilusiona con se oficialista-opositor a causa de sus 15 minutos de fama (aunque su condena está en el origen de su popularidad, puede haber sido magnífico votando en contra en el senado pero "Roma no paga traidores", creo que contribuyó formidablemente a salvaguardar las instituciones republicanas pero, el costo fue su cabeza y quizás todavía no lo entendió).
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