lunes, 17 de noviembre de 2008

Cárceles seguras?

Paris EngayoladaSiempre despotricamos contra nuestro sistema judicial-policial-carcelario; cada vez que se comete un crimen nos repartimos entre echarle la culpa a los jueces, los policías, los políticos, las escuelas y, en definitiva, cualquiera que esté a mano.

Una de las verdades que consideramos irrefutable es que hay sistemas mucho mejores que el nuestro, por lo menos en lo que refiere a meter preso a un delincuente y no permitir que salga nunca más.

Un simbolo de severidad, rectitud, inclemencia etc. es el pueblo alemán, su gobierno y, por supuesto, su sistema carcelario.

Por eso llama la atención la aparente facilidad que que se produjeron, en un corto lapso, dos fugas que pusieron en ridículo al sistema, sus guardianes y las normas que lo sostienen.

Uno es el caso de un preso que se envió por correo (me acuerdo cuando veía en viejos dibujitos animados como los personajes hacían este tipo de cosa de ponerse una estampilla y mandarse, nuca creí que fuera posible). El otro caso es una chica, poco menos que contorsionista, que se metió en la valija de su amiga y viajó en forma de exceso de equipaje hacia la libertad (increiblemente solo le quedaban dos semanas para recuperarla lícitamente).

Será cuestión de comenzar a dudar de las virtudes ancestrales de los alemanes no?

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